Una vez más, y van... podemos descubrir cual es (pudo ser) el origen de nuestro detective favorito. Esta nueva revisión, nos acerca a un hombre que sufre, que ansía vengar la muerte de sus padres. Los pasos que da para conseguirlo, inicialmente son vacilantes, dolorosos y en apariencia poco fructíferos. Pero en ellos podemos apreciar, a su pesar, la formación de un nuevo héroe, un justiciero que hará todo lo que esté en su mano para descubrir la verdad.
La historia alterna mediante flashbacks, entre el presente y el pasado, conectando momentos distintos y trasladando, en ocasiones, la acción al pasado. Es aquí donde se nos revela la situación de una familia feliz, adinerada, y comprometida con la sociedad. Este compromiso lleva a Thomas Wayne a presentarse a las elecciones para alcalde, lo que se traduce en una serie de anónimos y amenazas de muerte...
El presente nos muestra una ciudad de Gotham, en la cual las fuerzas de la ley se encuentran sometidas y dominada por la corrupción. El crimen impera a sus anchas.
Sin ánimo de desvelar la trama, diré que los hechos del pasado, marcarán a fuego al joven Bruce Wayne, empujándole, ya adulto, en una espiral de violencia e inevitables descubrimientos, que le revelarán la verdad de todo lo acontecido sobre su familia. Y hasta aquí puedo leer...
Con todo, los cambios sobre la historia oficial, finalmente no son tantos. De hecho, esta trama, quitando algún detalle, podría haber sido incluida dentro de la línea argumental oficial.
Para los nuevos fans, es una visión renovada, casi realista, del origen de uno de los pilares fundamentales del universo DC. Un buen punto de partida para empezar a conocer al personaje.
Los fans de toda la vida, inevitablemente, compararán esta obra con Batman Año I. Y aunque suene a tópico... “Las comparaciones son odiosas”. Lo digo porqué aunque estamos ante una muy buena historia (a mi entender), es la obra de Frank Miller la que gana en esta comparativa. No es mi intención crear falsas expectativas... Pero ojo, no por ello hay que dejar de disfrutar de este nuevo origen, pues cometeríamos el error de perdernos una de las mejores historias de este año... Podemos deleitarnos de ambas sin tener que elegir... ¿Verdad?
Sobre los autores poco que añadir. El tandem Geoff Johns (al guión) – Gary Frank (al dibujo) forman uno de los mejores equipos creativos que podemos encontrarnos actualmente. El guión de Geoff, no es solamente una vuelta de tuerca a la historia oficial.
Los diferentes matices aplicados sobre los personajes que participan en “Tierra Uno” demuestran los conocimientos que este gran guionista tiene sobre el universo DC.
Una cosa que me ha llamado la atención... Las cabriolas de Batman no se realizan en vano. Tienen dolorosas consecuencias,
distanciándose del tratamiento que le dan al personaje otros autores, en los cuales podemos ver a Batman evolucionar por los tejados como un Spiderman cualquiera. Trepando, saltando y casi volando con una naturalidad harto imposible. Batman es un hombre entrenado hasta el límite, sí...
Pero sólo es eso, un hombre. Y hay autores que parece que lo han olvidado... El dibujo de Gary (superior, como siempre) nos transmite el realismo, dolor y sufrimiento que hay que imprimirle a la historia... Rostros expresivos y escenarios en ocasiones inquietantes, nos adentran en una aventura sorprendente. Como rareza comentar que a nuestro encapuchado hombre murciélago, podemos verle los ojos. Algo que parece haber llamado la atención de todo el mundo...
Textos: Juan José Martínez Cámara
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