ECC Ediciones publica en España este tomo de tapa dura, con 192 páginas, en él se recopilan los ocho primeros números de la colección “Batman: The Dark Knight” perteneciente al nuevo universo DC. En estos 8 números podemos encontrar dos arcos argumentales. Una historia creada por la dupla David Finch-Paul Jenkins que ocupa la mayor parte del tomo, y que transcurre con los siete primeros números. Mientras que el número #8 llega de la mano del dúo formado por Ed Benes y Joe Harris.
A pesar de los muchos cambios sufridos en DC, donde el nuevo universo ha sufrido una especie de reseteo en el que algunos aspectos se mantienen, pero muchos otros han desaparecido, esta colección trata de mantenerse dentro de lo que habíamos conocido hasta ahora. Mientras que la llegada del nuevo universo DC traía consigo la aparición de muchos nuevos villanos, dejando aparcados a los malos de siempre, este tomo recupera a los enemigos más clásicos como Joker, Dos Caras o Bane.
Para los que no hayáis leído este tomo, decir que a pesar de no aportar nada nuevo, tiene cosas destacables que hacen de él un tomo interesante. Sin lugar a dudas si algo podemos destacar en esta serie es la aportación de David Finch, este genial dibujante canadiense nos muestra una vez más su nivel como dibujante, con algunas páginas realmente sensacionales en el interior. Finch ha formado parte de algunas de las series más importantes del mundo del cómic, el gran trabajo de Finch en Ultimate X-Men, Avengers o The New Avengers no pasó desapercibido en su país ni en resto del mundo, en 2009 recibió el Premio Joe Shuster como artista destacado.
Poco después DC se hacía con sus servicios de forma exclusiva arrebatándoselo a Marvel.
Pero David Finch no está solo en esta serie, junto a él encontramos al guionista británico Paul Jenkins, un destacado guionista, conocido por su trabajo en series como The Incredible Hulk, Hellblazer, o Inhumanos con la que consiguió el premio Eisner.
La historia trascurre con una masiva fuga en el asilo Arkham, con lo que veremos una dura lucha entre Batman y sus enemigos. Los lectores más expertos en DC han visto repetidas veces las fugas del asilo a lo largo de los años, pero en este tomo tenemos varias novedades con respecto a lo ocurrido en anteriores ocasiones, la primera es la aparición de una chica muy sexy vestida de conejo blanco (clara referencia a Alicia en el país de las maravillas)
de la que no desvelaremos la identidad para todos aquellos que no hayáis leído el comic, mientras que la segunda es la descomunal musculatura que presentan los enemigos de Batman, como perfectamente podemos ver en la portada, con un Bane bastante deformado o al Joker un poco más abajo, debido a la extraña mezcla entre la la toxina del miedo del Espantapájaros y otro compuesto.
Seguramente la mayoría de los seguidores de los cómics protagonizados por Batman han perdido la cuenta de cuantas fugas se han producido en Arkham, lugar al que van a parar todos los enemigos de Batman que tratan de asolar la ciudad de Gotham. La historia no tiene mucho más misterio, pero esto no debe desanimar a los seguidores del murciélago más famoso del mundo a la hora de animarse a leer el cómic. Está claro que este tomo no pasará a la historia por ser un cómic novedoso, ni una obra maestra, pero es una compra que puede servir para que muchos nuevos lectores se enganchen a esta serie. No solo porque el cómic cumple con su propósito que no es otro que el de entretener al lector, que al fin y al cabo es el propósito que muchos buscamos a la hora de leer un cómic, sino porque en este cómic podremos disfrutar del regreso de Bane, la portada no da cabida para la sorpresa. También tendremos la aparición de algunos componentes de La Liga de la Justicia, como Flash o Superman, que tendrán que acudir en ayuda de Batman. La llegada de Superman nos deja imágenes como ésta.
Pero además de todo esto, tenemos un último número con un arco argumental bastante diferente del resto de los números. De él se encargan, como cuento al principio, Ed Benes y Joe Harris. Benes se ha convertido en un muy buen autor, sus trabajos en series como Birds of Prey, La liga de la Justicia o Superman muestran un buen nivel. Mientras que Harris es un guionista que ha trabajado tanto en el mundo del cine como en el mundo del cómic, ha participado en series como X-Men, Spider-Man o Batman.
En este capítulo yo destacaría más el guión, puesto que es difícil destacar en el dibujo, a pesar del buen trabajo de Benes, cuando tienes prácticamente todo el tomo dibujado por un artista de la talla de David Finch al que es difícil eclipsar.
En resumen, el cómic cumple su cometido, no es una obra que pasará a la historia ni lo pretende, la edición viene bastante bien, se deja leer y tiene muy buen dibujo.
Textos: Iván Ortiz